UN ECLIPSE TOTAL

UN ECLIPSE TOTAL

Señor director:

Me refiero a la oscuridad que se está extendiendo por el Mundo. Cada vez más, seamos sinceros, no sabemos quienes somos los seres humanos, a donde vamos, qué valor tenemos, como vivimos, como nos preparamos para morir. Porque aquí todo el mundo habla, opina, dice, discute, critica, reprocha, niega y reniega, se hace apostata de sus conocimientos y convicciones más genuinas, enseñadas por sus padres desde pequeños. Y, la tónica general es que nadie, de hecho, cree en nada. Mis hijos y sus amigos solo quieren tener, "usar y tirar" todo: la vida, las relaciones, la amistad, el sexo, las fotos antiguas, los recuerdos... He de decir que solo hay una sola cosa cierta, bien cierta, que hemos de morir. Todos tenemos que morir. Nacer, hoy en día, no es seguro. Quizás venimos en proyecto y somos abortados o nos quedamos en embrión congelado por esas leyes que nosotros mismos nos damos, queriendo construir una..."torre de Babel". Vivir es inseguro pues en cualquier momento nos pueden atracar, robar o matar. ¿ O no es verdad?

Pero quiero decir algo positivo: Hay "una barquilla", en medio de ese mar proceloso que navega contra viento y marea desde hace dos mil años... y más, que es la Iglesia y sus cuatro Evangelios. En el pozo de Jacob le dice Jesús a la Samaritana: Si conocieras el "don de Dios" y quién es el que te dice "dame de beber"... El mundo no quiere saber de Dios, pero está ahí. Nos espera desde el principio de la creación. Cada ser humano vale para El más que muchos pájaros. Nuestra alma es creación suya y tiene para El un valor infinito...Su Hijo murió por ella. Pues infinita será su bondad y su

paciencia con cada uno. Hay que volver a mirar el rostro de Dios para que esta sociedad, en sus individuos y en su conjunto, encuentre el camino de la paz y el progreso verdadero.

Enrique Palacios Entrena

Avda.Andaluces 10-Granada

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