domingo, 27 de enero de 2008

LA IMPORTANCIA DE LA FAMILIA

La importancia de la familia.

En esta ocasión el tema es el "ambiente familiar". Claro, lo más importante de la familia son sus componentes, las personas. No lo perdamos de vista (No es la casa, ni el coche, ni la Tv, ni el viaje, ni los muebles...). La mujer, la dueña de la casa. El marido, el "jefe". Los hijos, los que mejor lo pasan pues, en principio, lo tienen todo resuelto cada día, aunque tienen que ganárselo o por lo menos valorarlo. La comida preparada, la cama hecha, la casa limpia, luz y agua, calefacción, mesa y ordenador para estudiar...; si encima no lo valoran..., ¡ uf !. En "occidente" estamos mal acostumbrados, tenemos de todo: casa, coche, movil, mp3, ordenador, cine en casa, varias TV, playas, diversiones, discotecas todas las semanas por todos "los planetas", como diría alguien. ¡ Fíjese Vd ! : 20 millones de mexicanos viven por debajo del humbral de la pobreza; 80.000 pueblos de la India no tienen luz electrica; 300 millones de niños trabajan en el mundo a una edad prohibida; de la muerte por enfermedad y hambre en Africa..., para que hablar. Y yo les digo a mis hijos que no se quejen si les falta algo. Que valoren todo lo que tienen. Y de todo, -y más en España-, la familia. Hoy tener una "buena familia" (padre-madre-abuelos-tíos- primos) y convivir, es un tesoro.
En la familia todos son importantes y mutuamente se tienen que cuidar y ayudar. Cuando, cuando aprenderemos esto ?. En lugar de discutir, pelear o perder el tiempo en uno mismo. Hace falta una continua formación humana, intelectual y cristiana: caridad, fortaleza y autoridad en el hogar familiar son una misma cosa. El ambiente ha de ser de respeto, mucho respeto. Pero luego, más: de cariño, de estar a gusto, no pelear, vencer el mal genio, sonreír y escuchar (mis hijos me destacan esto de escuchar, creo que llevan razón).Lo más importante del día, de cada día es la mujer, el marido, los hijos. (Como decía el lema de los tres Mosqueteros, " uno para todos y todos para uno ".).
Cuidado de las cosas materiales de la casa: cerrar una puerta, apagar una luz o encenderla si hace falta, la ropa ordenada porque tiene que durar, los libros tienen que llegar a los nietos. Arreglar cosas, no tirarlas.En definitiva, que cada miembro de la unidad familiar se sienta responsable de las cosas materiales de la casa.
Y, luego y a la par, formación cristiana. Solo doy una cita: En virtud de su dignidad y misión, los padres cristianos tienen el deber específico de educar a sus hijos en la plegaria, de introducirlos progresivamente al descubrimiento del misterio de Dios y del coloquio personal con Él. (Juan Pablo II , Familiaris Consortio, nº 80). Casi nada, ponte a pensar.

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